La visita del extraordinario cometa de 1843 a los cielos mexicanos, puso al descubierto en la prensa local de la época, una gran actividad astronómica con trascendencia pública que había escapado a su conocimiento, que se había limitado al acontecer individual de algunas personalidades reflejadas en sus notas. Este hecho, importante por cierto, puso a la vez en descubierto la existencia de un observatorio ignorado en la localidad de Durango con actividad cierta y socialmente trascendente que vale la pena rescatar…
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